A ti.
Transparente amor.
Me enseñaste a respirar
fuera del agua.
Y a que no se adelanten
mis sandalias
a mis pies.
Olvidaré
las veces que he tropezado.
Como un gran pez
anciano y sabio,
sabes huir de los anzuelos
y conoces las grutas
más seguras
donde conducirme.
Traes para mi
cuanto coral necesito
para adornar de rojo
mi más negra tristeza.
Gran pez de marzo.
Disipas mis brumas,
y mis dudas.
No quiero volver a ver
tu reflejo,
desde la superficie…
Sumergí mis prejuicios
por fin,
allí donde cubre.
Y ya no echo de menos
el aire.
2 comentarios:
menos mal que estabas "seca", charito :P ¿ultimado todo? un besote, guapa. da gusto leerte :)
Hola amiga!!
Te dejé un comentario en tu blog.
Tengo ganas de verte, ¿eh?
Tenemos que hacer por quedar un día, a ver si es verdad.
Y bueno, seca, seca... tó es ponerse a intentar mojar los días un poquito...
Parece que ya voy notando la humedad.
Sí, todo ultimado.
Te aviso para cuando sea "el parto", pues me gustaría que también estuvieras.
Un beso.
Publicar un comentario