Vistas de página en total

26 de marzo de 2014

Bombones

A veces echo de menos la ilusión (propia y ajena) de las primeras veces.
El primer libro, la primera presentación, las primeras lecturas, los primeros actos más o menos importantes a los que me invitaban. Significaba que me tenían en cuenta. Que algo de mi esfuerzo por estar en el candelero, era recompensado.
Ahora, ya no sé qué tiene sentido y qué no lo tiene. Es una sensación extraña estar en medio. Brillar a veces, y apagarme de pronto. 
No tengo laureles, y tampoco estoy segura de quererlos ni necesitarlos.
Algunos me envidian ahora. Antes también. Pero era diferente.
Es difícil no tener derecho a los mimos por ser el juguete nuevo, pero no llegar a objeto de colección.
Esa tierra de nadie parece baldía, pero no lo está.
Invita al recogimiento, y a seleccionar aún más cuidadosamente si cabe, las compañías, las apariciones en público, a las personas con derecho a disfrutarme.
Me van a odiar, me van a amar, de todas formas. No importan los méritos que se hagan para levantar pasiones.
¿Y para qué sirven las pasiones de los demás?
Si me odian, si me aman. Tampoco me preocupa. Ya no.

..................................................................................................................


Les llevé bombones. 
Pero no sabían que en el fondo mi intención era diluir mi inseguridad en el chocolate. 
Sobraron algunos. Los abandonaron en el plato. Me los llevé de vuelta, en un intento de recuperarme.
Y ya en casa, descubrí que a mi tiempo le faltaba un pedazo. El vacío dolió. Nada vuelve. Ni sus pies pequeños. Ni la sonrisa única que me perdí ayer.
No volveré a llevar bombones a ningún sitio.

......................................................................................................................

Para ser ambicioso, primero ha de entrenarse la elegancia.

4 comentarios:

Mamen Orcero dijo...

A veces,tengo la sensación de vivir subida en la montaña rusa de las ilusiones. Ayer pensé que era tiempo de cambiar la foto del perfil, de volver a guardar los sueños en la maleta y (apropiándome de tu maravillosa metáfora), de darme un buen atracón de bombones. Pero la desilusión apenas me dura el tiempo estéril en el que nadie responde a mis saludos. Luego me encojo de hombros y me siento a escribir.
Un beso, guapetona.

La Griega deAndaluCái dijo...

Quiero felicitarte por tu presentación ayer en CLL de Chiclana, de tu libro "Fondo de armario". Como sabes, no pude estar entre los presentes, pero me consta por los compañeros que estuviste genial.
Ya solo me queda adquirir el libro y disfrutar yo tambien.
Un abrazo!!!

La Griega deAndaluCái dijo...

Quiero felicitarte por tu presentación ayer en CLL de Chiclana, de tu libro "Fondo de armario". Como sabes, no pude estar entre los presentes, pero me consta por los compañeros que estuviste genial.
Ya solo me queda adquirir el libro y disfrutar yo también.
Un abrazo!!!

genialsiempre dijo...

Yo sí estuve y disfruté de los bombones y de tu poesía. Quizás no te supimos reconocer lo que nos gustaba, pero eso no es obstáculo para decírtelo aunque sea tarde.
En cuanto a los bombones... eran demasiados y algunos los tenemos prohibidos, pero no te los dejamos como desprecio, no lo veas así.
Por si lo dudas, en el CLL se te aprecia y mucho